‘Doctor, tengo un problema
Cuando hago el amor con mi mujer,
me da la impresión de que no siente nada.
Algunas veces incluso se duerme,
ayudeme Doctor’.
- ‘Eso tiene una explicación científica.
Algunas mujeres en estado de excitación se acaloran tanto
que les es imposible sentir algo.
Trate de hacer el amor y abanicarla al mismo tiempo’.
- ‘Gracias doctor’.
Y esa noche así lo hizo.
Pero cuando atendía al abanico,...
no atendía a lo otro.
Así que contrató a un negro para que abanicase a su señora.
- ‘Venga, negro, abanica. ¿Sientes ahora Maruja Sientes?’.
- ‘No, nada no siento nada’.
- ‘¡Más fuerte negro! ¿Y ahora, Maruja?’
- ‘Nada, manolo nada’.
- ‘Negro, trae el abanico y ponte tú’.
El negro se sitúa encima de Maruja y el manolo abanicaba.
- ‘¿Y ahora Maruja? ¿Sientes?’
- ‘Siiiiiiií, siiiiiiiiiií, ahora siiiiiiií!’
- ‘¡Ves negro pendejo! ¡No sabes ni abanicar!’
Muy buenoooo!!!!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminar